El carecer de una identidad (o peor tener una identidad que puede perjudicar su desarrollo por no brindar confianza a sus clientes) le será difícil su crecimiento por que no es reconocible ni recomendable a mayores consumidores.
Una identidad corporativa es el rostro comercial (o profesional) de cualquier persona o grupo de personas trabajando por un beneficio común.
La identidad corporativa tiene sus raíces en las fuerzas guerreras o militares de civilizaciones ancestrales, donde sus miembros tenían un uniforme, una insignia en su escudo, un grito de guerra y frecuentemente himnos que identificaban al ejército que lo profesaba y con ello (amigos o no) podían primero reconocerles y luego respetarles.
La identidad corporativa se compone de logotipo (o imagotipo), una expresión gráfica breve que identifique a la empresa o producto dándole una personalidad apropiada para el mercado al que se dirige. Colores institucionales, slogan (una frase breve que diferencia y que junto con el logo hace sinergía para hacerse único, recordable y reconocible positivamente). Así como visión, misión y valores empresariales.
LOGOTIPO
La personalidad de una empresa y la imagen que tenemos de ella, ubicada y fijada en nuestra memoria es gracias precisamente a la identidad corporativa que tiene y reconocemos. Dicha identidad fue diseñada, planeada y ejercida.